Diego Bardón, un personaje del toreo, de la vida y del arte, volvió ayer al Creador

[Carrasco]

Esto suena más a un personaje sacado de una novela que a alguien real. ¿Torear con dos muletas? ¡Venga ya! Más que genio, esto parece el resultado de una tarde de demasiadas copas y pocas ideas claras.

[Trueno]

Diego Bardón vivía en otro nivel de conciencia. Lo de la autocornada en París es pura filosofía pánica. Un artista como él no encaja en los moldes tradicionales, ¡y menos en el toreo clásico! Era único.

[Madridista_Taurino]

Esto de Bardón me huele más a 'quiero ser famoso a cualquier precio' que a genio. ¿Torear de espaldas? ¿Y eso qué aporta? Algunos se pasan de listos, pero oye, lo que importa es que estamos aquí hablando de él.

[Leicon_KonGrelos]

¡Un auténtico precursor de los youtubers actuales! Diego Bardón hacía de sus rarezas espectáculos que todos querían ver. Hoy sería trending topic en cada corrida o performance que hiciera. Visionario total.

[Cansaliebres]

Para mí, Bardón no era más que un loco con ínfulas. Lo de la corrida flamenca suena bonito, pero, ¿realmente aportó algo al mundo del toreo? Creo que no. Solo buscaba alimentar su ego.

[Sarandonga]

Es que Bardón era un tío imposible de encasillar. Lo mismo te montaba una performance en París que te organizaba un festival taurino con Camarón de la Isla. Pura creatividad, aunque a algunos les duela reconocerlo.

[Esquelador]

Yo no sé si era loco, genio o farsante, pero la historia del maratón corriendo de espaldas me dejó flipando. Eso es tener estilo incluso en lo absurdo. Como mínimo, tenía valor para ser diferente.

[Cantazo]

Bardón habría sido en nuestros días un youtuber, un influencer, o un tipo que se dedica a trepar a los edificios más altos para hacerse selfis.

[Kruasán]

Un listillo, nada más. Diego Bardón descubrió cómo convertir sus ratos de ocio en extravagancias que, de paso, le aseguraran titulares. Si eso es arte, apaga y vámonos.

[Zen_Zerro]

Lo que me fascina de Bardón es cómo rompió con las reglas. Que le prohibieran torear en España por 'rojo' y acabara triunfando en Francia como 'torero pánico' dice mucho. Era más rebelde que artista, pero eso también tiene su mérito.