El régimen bolivariano, el cartel de los soles, y Zapatero
Publicado: Mié Sep 10, 2025 10:35 am
El régimen bolivariano, el cartel de los soles, y Zapatero
El régimen bolivariano es una fachada para sostener el llamado “gorilato” de Hugo Chávez, un coronel que llegó al poder mediante urnas en Venezuela. A través de ese gorilato se infiltró el comunismo hasta derribar cualquier iniciativa creadora de riqueza, como ya había sucedido en Cuba.
Chávez fue el arquitecto del derrumbe económico. Su heredero, Nicolás Maduro, terminó cayendo en manos del narco a cambio de financiación. Así nació el dominio del cartel de los soles, es decir, los militares que controlaban el negocio de la droga.
Hoy el cartel controla a Maduro, a Venezuela y a quienes orbitan alrededor de ese poder. Entre ellos, políticos de renombre internacional. En 2018, The Wall Street Journal recogió críticas de la oposición venezolana, que acusaba a José Luis Rodríguez Zapatero de favorecer al régimen en las negociaciones, debilitando a la disidencia democrática.
Donald Trump, por su parte, ha dictado sentencia contra el narco, pero no contra el régimen bolivariano. Tampoco parece interesado en derribar la dictadura cubana. Para Estados Unidos, crear pobreza en Iberoamérica es cuestión de “razón de Estado”.
Con el Caribe bajo vigilancia “al barquito de remos”, Trump espera que el régimen de Maduro caiga por falta de dólares con los que pagar a sus esbirros: policías y militares que, llegado el momento, buscarán un sucesor.
Queda abierta la incógnita: ¿hasta dónde estará dispuesto a llegar Trump para frenar el tráfico de fentanilo y cocaína? La cuestión es si se atreverá a tirar de los flecos, allí donde aparecen nombres como Zapatero y otros dirigentes señalados como supuestos partícipes de un negocio tan execrable como el narcotráfico.
El régimen bolivariano es una fachada para sostener el llamado “gorilato” de Hugo Chávez, un coronel que llegó al poder mediante urnas en Venezuela. A través de ese gorilato se infiltró el comunismo hasta derribar cualquier iniciativa creadora de riqueza, como ya había sucedido en Cuba.
Chávez fue el arquitecto del derrumbe económico. Su heredero, Nicolás Maduro, terminó cayendo en manos del narco a cambio de financiación. Así nació el dominio del cartel de los soles, es decir, los militares que controlaban el negocio de la droga.
Hoy el cartel controla a Maduro, a Venezuela y a quienes orbitan alrededor de ese poder. Entre ellos, políticos de renombre internacional. En 2018, The Wall Street Journal recogió críticas de la oposición venezolana, que acusaba a José Luis Rodríguez Zapatero de favorecer al régimen en las negociaciones, debilitando a la disidencia democrática.
Donald Trump, por su parte, ha dictado sentencia contra el narco, pero no contra el régimen bolivariano. Tampoco parece interesado en derribar la dictadura cubana. Para Estados Unidos, crear pobreza en Iberoamérica es cuestión de “razón de Estado”.
Con el Caribe bajo vigilancia “al barquito de remos”, Trump espera que el régimen de Maduro caiga por falta de dólares con los que pagar a sus esbirros: policías y militares que, llegado el momento, buscarán un sucesor.
Queda abierta la incógnita: ¿hasta dónde estará dispuesto a llegar Trump para frenar el tráfico de fentanilo y cocaína? La cuestión es si se atreverá a tirar de los flecos, allí donde aparecen nombres como Zapatero y otros dirigentes señalados como supuestos partícipes de un negocio tan execrable como el narcotráfico.