Hay culpables
Antón Losada pertenece al grupo de "gurús hispanos" de la izquierda que pontifican como santones, que pasean por tertulias y charlas como vacas sagradas. Son los intocables del sistema, unos con cara seca, otros mofletudos, son caras duras y en este caso además, una espesa capa de mugre cubre su piel y sus artículos.
Exige medios a los hospitales públicos. Pero Antón Losada no pagaba a su asistenta. Fue denunciado y condenado. Pero sigue siendo un santón de la izquierda, el "gurú", una vaca sagrada.
Y sigue sin poder callar. En mitad de la tragedia, con 1.000 muertos causados por el coronavirus asesino, Antón Losada echa los 1.000 muertos al saco de los recortes en la sanidad pública.
1.000 muertos y la cifra fatal no ha terminado de cerrarse. Serán muchos más porque la desgracia de 1.000 personas muertas solo es el principio, y la tragedia se presagia inmensa.
Y tenemos derecho a protegernos. Tenemos derecho a pedir justicia. La sociedad, la gente común, la gente de la calle, los que ponen los miles de muertos, tienen derecho a pedir justicia. También a incriminar para obtener justicia a este Antón Losada.
Dejad hablar a los expertos: y los expertos hablaron, y le pondré solo tres ejemplos de la Organización Mundial de la Salud.
"Emergencia sanitaria" declarada el 31 de Enero por la OMS
La OMS declara la situación de “extrema gravedad” el 13 Febrero
Declaración de pandemia en todo el mundo el 25 de febrero por la Organización Mundial de la Salud.
Hablaron los expertos y hay culpables de quienes desoyeron la voz de los especialistas. El virus asesino es culpable. Pero también son culpables los que cooperaron en su expansión. Los que callaron la gravedad del situación. Miles de muertos y esta inmensa tragedia aún irá a más. Asiste el derecho a pedir justicia.
Convocar, alentar y fomentar la participación en manifestaciones por todo el país bajo la emergencia sanitaria del 31 de enero; la extrema gravedad del 13 de febrero, o la declaración de pandemia del 25, convocar, fomentar aquellas manifestaciones es delito. Callar y no denunciarlo, también es delito. Usted calló y quiso sacar "réditos" de la asistencia a la manifestación, réditos de entre otros pozos, este:
Otro buen 8M Otro buen día para volver a juntarnos...
Porque hay culpables. Los aprendices de brujo, los santones de opinión, se rieron de las advertencias de la Organización Mundial de la Salud que por tres veces advirtió de la tragedia cada vez en términos más graves, hasta dictar la terrible sentencia: están ustedes ante una pandemia. Y Antón Losada no hizo caso. A lo mejor ya no serán vacas sagradas.
Porque hay culpables. China, Japón, Corea lanzaban avisos al mundo, especialmente desde China, de una gravedad que no podían dejar de oir en occidente. Hubo expertos que oyeron y dictaron normas. Fue en España. Ese experto fue cesado. Y otros callaron.
Porque hay culpables. Cuando la tragedia había mordido a Italia y los contagiados se contaban por miles, ustedes, los santones de la izquierda, lso aprendices de brujo, convocaron a grandes manifestaciones por toda España. Y estas son las pruebas. Y usted también. Antón Losada. Usted también jugó a ser brujo y mandó a la gente al pudridero que eran las reuniones multitudinarias, como ya les habían advertido.
1.000 muertos merecen respeto. Y los que vengan. La tragedia es inmensa. Antón Losada et alia, Antón Losada y otros deben responder ante un gran tribunal por los miles de muertos que nos dejarán, y la ruina económica incluida.