Foros Toreros

Todos recordamos el caso del perro Excalibur o Escalibur, cuya propietaria estuvo contagiada de ébola -una enfermedad mortal- de la que felizmente para todos sanó. Su perro, sin embargo, de nombre Excalibur, fue sacrificado por orden de Fernando Simón; sí, el mismo Simón que ahora a diario informa sobre el avance del coronavirus. Ahora no es un animal, son casi cien mil visones.

Casi cien mil visones serán sacrificados en una granja de Teruel porque una míinima proporción ha dado positivo por coronavirus. Como en el caso de Excalibur, no se conoce ningún caso de contagio por traspaso de visones a humanos; incluso se da por imposible. Sin embargo, y sin lágrimas (lágrimas falsas, de cocodrilo, hay que decirlo) 92.700 visones serán ejecutados sin ningún animalista que les llore o que pida lágrimas para ellos.

¡Cuánta hipocresía en el mundo de los ricos blancos!

Están tardando los animalistas en organizar una quedada para llorar por los visones igual que lloraron a Escálibur pero multiplicado por 90.000.

Esa discriminación deteriora la credibilidad de los animalistas.

Cien mil visones sacriicados y ni una lagrimita derraman nuestros animalistas. Va a ser que están bien adiestrados para abrir y cerrar la boca según les ordenen.

Por la memoria de Excálibur, o Escalibur ¡que alguien haga una quedada para llorar por los casi 100.000 visones y su eterno descanso!

¿Han perdido el juicio los animalistas ante la terrible muerte de 100.000 visones? ¡No, ni se han inmutado! Tienen la piel de rinoceronte cuando quieren o cuando no hay dinero de por medio.

Dinamarca matará 17 millones de visones para frenar una nueva variante del coronavirus que ha saltado a humanos

Así lo dice un periódico: La nueva cepa podría poner en peligro la efectividad de la futura vacuna, según las autoridades del país escandinavo. No hay protestas por parte de los animalistas. Los productores recibirán jugosas subvenciones para salvar el negocio de la piel y todo el bienestar y riqueza que ha desarrollado una avanzada industria del diseño y de la ropa.

100.000 visones más. Otros 100.000 visones de Irlanda serán sacrificados. Las autoridades temen que sean portadores de una mutación transmisible al hombre y han drecretado el sacrificio de los animales.

Nadie llorará por ellos, los animalistas, ecologistas, veganos... tienen sus sentimientos actualmente en otros menesteres.

Ni una lágrima de los animalistas, oye, ni una ¡y son cientos de miles los pequeños escaliburs sacrificados!

Ni una lagrimita de los animalistas por las decenas de miles de visones sacrificados por motivos de salud. Y ni una lagrimita por los miles de toros sacrificados para que no reciban un trato inferior a la que su condición exige. No llorarán animalistas ni ecologistas: son hipócritas.