Foros Toreros

Si al ministro socialista Uribes le gustaba el teatro por "pacífico", porque no era conflictivo ni es sus actores ni en sus obras, frente a la tauromaquia, llega una vuelta de tuerca.

Un partido de extremistas de izquierda en Andalucía ha presentado una proposición no de ley en la que se reservan para los políticos la facultad de declarar qué es arte. Estos extremistas quieren prohibir la tauromaquia y no esconden su vena totalitaria: "Hay muchos y reconocidos artistas que se han visto fascinados por el toreo, pero eso tampoco es razón suficiente para considerarlo arte." Este es uno de sus fundamentos para su proposición para prohibir la tauromaquia.

¿Qué razones llevan a los extremistas de izquierda a querer prohibir un arte que nace del pueblo? Los socialistas son antitaurinos por moda. Los extremistas de izquierda aluden a la crueldad del espectáculo. Y es aquí donde los extremistas de izquierda esconden sus verdaderos motivos para este debate.

El primero es el genocidio que sigue hoy desde hace décadas en países comunistas de América,los mismos países que ellos defienden (Cuba, Venezuela...). El segundo motivo, está en que en nuestros días comienza a oírse en España una reivindicación de largo alcance en varios países: equiparar el comunismo al nazismo, por compartir ambos fines, medios y pasado en muchos países. La extrema izquierda para sacudirse cualquier vinculación a los regímenes totalitarios comunistas actuales y pasados, traslada el debate sobre "la barbarie" a la tauromaquia.

Traslademos el debate sobre barbarie y genocidio a lo que está sucediendo en nuestros días en varios países de América con el apoyo de estos extremistas de izquierda. Y que sea más pronto que tarde y queden equiparados el nazismo y el comunismo que defienden nuestros extremistas de izquierda.

Y que el pueblo decida qué es arte.

"Y que el pueblo decida qué es arte." La tauromaquia es uno de los eventos culturales con la economía más saneada en datos antes de la pandemia. Y se recuperará. Porque el pueblo decide qué es arte. Así de sencillo.

El cine seguirá dependiendo de subvenciones para "ir tirando mal que bien"

Hubo un tiempo en que los madrileños comenzaron a cantar imitando las voces de la ópera. Estos madrileños acudían a la ópera como sirvientes o personal del teatro, y en esas imitaciones nació la zarzuela. Es arte. Como el toreo.

Si de verdad decide el pueblo qué es arte, la mitad de los actores de cine actuales no se habrían subido a un escenario para actuar fuera del grupito de teatro del colegio o instituto. Por ello hay que insistir, el pueblo vota por la cultura cuando consume cultura. Y los toros son un espectáculo libre de subvenciones.

Es el pueblo, el público, el que paga su entrada quien decide qué es arte y qué no es arte. Willy Toledo se ha quejado de no poder trabajar en España porque nadie ve su "espectáculo" y es que nadie compra entradas para sus obras. Es el pueblo que cuando compra una entrada vota qué es arte y qué no merece la pena subir a un escenario.

La tauromaquia es el arte más refrendado por el público. Y se refrenda con dinero contante y sonante para adquirir entradas. 2020 y este año han sido nefastos por la pandemia. Pero la tauromaquia resistirá a la pandemia y a los prohibionistas.

Es el público, el pueblo en los toros decide qué es arte. Este es un chiste de los comunistas ¿defina estilo impresionista? cuando el pintor pinta lo que ve; ¿y el expresionista? cuando pinta lo que siente; ¿y qué es el realismo socialista? cuando el camarada pintor pinta lo que le manda el jefe.

El pueblo decide qué es arte y en los toros la decisión es en directo, en la plaza de toros. Pero esto no quiere decir como he leído por ahí que el público que paga es el que manda. En los toros ya no manda el público, en el arte sí.

Y el pueblo decide qué es arte. El problema surge cuando los poderosos meten a un "Jorge Javier" como mercancía artística y la máquina admite semejante yerro lanzando al nuevo "artista" a las más altas cumbres y alabanzas del estrellado. Hasta que se estrella.

Qué es arte y qué es bueno. Qué no es arte y qué es malo. Esto lo decide siempre el pueblo con su voto, y vota cuando compra. Los snobs pueden decir hoy una cosa y otra mañana. Pero la voz soberana es la del pueblo. Y donde mejor se oye esta voz es en la plaza de toros.