Foros Toreros

Nunca pensé que se iba a cometer esta salvajada con una pobre mascota que depende para todo de su amo: cagar, mear, comer, pasear. Además castran al gato o vacían a la gata del sistema reproductivo, y luego le cambian su dieta natural. Miseria humana.

Obligar a una mascota a una alimentación vegana es un delito, igual que arrojar a una cabra viva desde el campanario. Pero es un delito más grave, porque la cabra fallece al instante, y esas mascotas forzadas al veganismo sufren hasta el final de su muerte.

Un sadismo refinado obligar a las mascotas a sobrevivir a una vida vegana hasta el final de su muerte. Es matarlos lentamente, durante años, día a día, semana a semana, mes tras mes. ¿hay una crueldad mayor contra los animales?

Solo de pensar que hay gente que fuerza a sus perros y gatos a vivir una vida vegana me pongo malo. Pero si pienso que hay empresas dedicadas a esto precisamente, a cambiar los hábitos naturales de alimetación de los animales, me doy cuenta de que el mundo se ha vuelto loco, muy loco.

Vuelve la fórmula uno y vuelve el conductor Hamilton con sus perros veganos: no debería estar permitido este tipo de tortura contra un pobre animal indefenso. Las protectoras de animales deberían tomar cartas en el asunto.

Entre tirar la cabra desde un campanario, o arrancar el cuello de los gansos como los vascos en sus fiestas, es peor forzar a la alimentación vegana de una mascota por capricho de su dueño. Perros y gatos comen carne, es su derecho animal.

Hay que ser mala persona para maltratar a un animal de esta forma, de manera constante, día a día; forzando al animal contra sus instintos, y disfrutando con ello. Animalistas sin escrúpulos, sin conciencia, sin corazón.

Forzar a los animales a una alimentación vegana debe considerarse como un delito de maltrato animal agravado y conllevar prisión para quien atormente así a una pobre mascota.

Esto es un delito de maltrato a los animales. Obligar a un perro o a un gato a una dieta vegana debería estar penado por las leyes. Y si es veterinario o profesional del animalismo -santuarios, refugios, etc.- se les debería prohibir ejercer la profesion.

Forzar a un pobre animal esclavizado como mascota en una ciudad a una alimentación vegana por fanatismo de su amo es delito. Punto.