Foros Toreros

Yace en malas manos porque no es accesible al público. Y los aficionados tienen derecho a que este rico archivo cultural que forma parte del patrimonio artístico esté al alcance de todos los españoles; no secuestrado por nuestros talibanes locales.

La censura contra la tauromaquia es rampante. Las redes sociales sabemos cómo actúan y luego está televisión española, dispuesta a perder dinero y dejar en el olvido un patrimonio taurino que es propiedad de todos los españoles. ¡tve, chorizos!

Se llama censura. Ocultar el archivo taurino de televisión española es censura.

La Fundación del Toro de Lidia debería dedicar sus energías a doblegar esa tiranía funcionarial de televisión española, y rescatar el archivo taurino de todos los españoles. En vez de esta noble actividad, andan aliados con "El Fundi" para tumbar la iniciativa de los ayuntamientos que pagan en abierto a los novilleros y sus cuadrillas en las novilladas que organizan.

Una bonita ocupación para la fundación del toro de lidia, en lugar de enredar con los toreros y los banderilleros para arañar unos cuantos euros para "sus" novilladas, aunque sea haciendo competencia deslearl a los ayuntamientos que organizan novilladas poniendo dinero de sus vecinos.

Esto me recuerda a la "desamortización de Mendizábal" cuando por ley, las órdenes religiosas se vieron obligadas a poner a la venta aquellas propiedades que no tenían utilidad económica para las órdenes religiosas. El archivo taurino está ahora en manos muertas. Urge recuperar el archivo para la cultura.

Si la Fundación del Toro de Lidia no quiere meterse contra el fraude en las astas de los toros, que se ponga a "desamortizar" el archivo taurino de televisión española. Es una riqueza que en estos momentos se encuentra en "manos muertas" y

Hay que retirar el archivo taurino de las sucias manos de televisión española. El archivo taurino no puede permanecer "a la sombra" o secuestrado.

La memoria "el alma" de la tauromaquia, de los últimos 75 años no puede estar secuestrada por los antitaurinos.

La memoria sentimental y artística de la tauromaquia está en manos de políticos extremistas, sin cultura y sin sensibilidad. Urge poner remedio a esto.