Foros Toreros

El futuro en España explicado según Pérez Reverte

Situación actualísima:

Quien amenaza a Sánchez es Puigdemont. Que, sin embargo, el separatista está más débil que nunca. El movimiento de fichas es el siguiente: se aprueba una ley de amnistía de difícil aplicación. Puigdemont -que probablemente no se verá beneficiado por esa amnistía- se revolverá y le morderá como un alacrán... para derribar a Illa en Cataluña. Provocando Puigdemont incluso una moción de censura aliado con Feijóo y VOX. Antes de esto, Sánchez es capaz de convocar elecciones generales el mismo día de las elecciones en Cataluña. Porque lo de Cataluña no parece tener arreglo.

A este brusco giro del guión Sánchez se presenta como el único capaz de parar a la ultraderecha: VOX y el PP. Como el hombre providencial que ha "desactivado" al separatismo catalán ofreciendo primero un indulto; luego una amnistía... y los últimos separatistas catalanes se lo pagan con traiciones: Con estos antecedentes, Cataluña vota a Sánchez y el resto del pueblo español también vota a Sánchez.

¿Alvise amenaza a Sánchez? No. Abascal, VOX ¿amenazan? no. Son para Sánchez sus mejores peones de brega. VOX y Abascal son los mejores peones de Sánchez porque se entretienen atacando más tiempo a Feijoo que al verdadero granero de votantes de la ultraderecha: los de Podemos o Sumar desencantados de sus líderes... ¿A quién votan por mayoría en la Alemania ex-comunista? a los colegas de VOX Alternative für Deutchland. VOX se pierde atacando primero a Feijóo, luego a Sánchez, y en tercer lugar, a los graneros naturales de votantes de la ultraderecha, la ultraizquierda. No amenazan a Sánchez.

¿Feijóo amenaza a Sánchez?. Pero Feijóo está "neutralizado" por VOX. Feijóo no puede ni acercarse a Abascal, porque Abascal soltaría en una semana cada día a dos de los suyos dando vivas a Franco... y esto sería la muerte política de Feijóo. Feijóo solo "sumaría" con un aliado imposible VOX. Por tanto no es enemigo de Sánchez, no le amenaza.

Raudo en la explicación, pero con toda la razón. Alvise es un peón de Sánchez. Como lo es VOX. El enemigo de Sánchez es Feijóo porque solo Feijóo le puede quitar el poder. Y Feijóo está "maniatado" por VOX. Hoy los de Abascal han montado "una de las suyas" en el parlamento de Baleares. VOX puede montar escenas de estas a diario... y estas escenas no es que sean indigestas sólo para Feijóo, es que el PP pierde cientos de miles de votos por el "centro", de los ex-socialistas. Y sin esos votos, no hay relevo para Sánchez. VOX es una herramienta de Sánchez, y Alvise.

Pero el enemigo, por ahora, el inmediato, cierto, es Puigdemont. En La Vanguardia hablan hoy miércoles de elecciones para el 13 de octubre... Un día muy "hispano" muy de comunidad internacional... una o dos semanas antes, o una o dos semanas después, lo que diga la aritmética el calendario y las prescripciones legales.

Pero el retrato de amigos y enemigos de Sánchez es claro.

De acuerdo, la batalla para Sánchez está ahora en Cataluña, más que una batalla, es una guerra. "Las tres derechas" sobre todo por falta de inteligencia de Alvise y VOX se enzarzan en discusiones entre ellos, pero no "suman" nuevos votantes. Y luego están las patochadas de VOX.

Puigdemont necesita dos cosas: la primera, debilitar en todo lo posible a Esquerra tan pronto como tenga ocasión; como ahora; la segunda y no menos importante, volver a prender la llama del independentismo en Cataluña. Lo primero puede hacerlo obligando a una segunda convocatoria electoral. Y lo segundo, tumbando a Sánchez y provocando el regreso de "la derecha" al gobierno de España.

Blanco y en botella.

Cuando controla el más alto tribunal con un peón de confianza como Pumpido, ya no necesita controlar a los jueces del Consejo General del Poder Judicial.

Me convence: Puigdemont tumba a Sánchez, porque no le llega la amnistía. Elecciones generales, gana el PP y necesita a VOX. Puigdemont organiza una insurrección en Cataluña. atpc.

Hay que escuchar a Pérez Reverte de vez en cuando, porque tiene cosas que decir, cosas importantes que a muchos les han silenciado, pero que están ahí, y Pérez Reverte lo cuenta como nadie: