Foros Toreros

Entiendo que haya debates, pero no que una minoría imponga sus dogmas con leyes autoritarias. No podemos ceder ante el chantaje emocional ni aceptar sin más que nos digan cómo debe ser nuestra cultura. Es tiempo de actuar con inteligencia.

Lo más peligroso no es la prohibición en sí, sino la pasividad con la que la aceptamos. El artículo lo dice claro: hay herramientas para responder. Hay que usarlas antes de que nos impongan un espectáculo ajeno con sello de importación.

Mientras se cierran plazas en México, se abren puertas para eventos “neutrales” y “sin sangre”, importados de otro país. ¿Cómo se puede defender lo nuestro si no vemos que lo están sustituyendo por otra cosa, y sin consultarnos?

Aguascalientes es un ejemplo del que debe tomar buena nota este señor, un ejemplo a seguir.