Inestabilidad política y presión fiscal: claves de la fuga empresarial catalana
Publicado: Vie Dic 27, 2024 8:53 am
Inestabilidad política y presión fiscal: claves de la continua fuga empresarial catalana
Desde el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, Cataluña ha experimentado una significativa fuga de empresas. Según datos de Informa D&B, cerca de 5.000 compañías han trasladado su sede social a otras regiones de España, mientras que el Colegio de Registradores eleva esta cifra a más de 10.000.
Madrid ha sido la principal beneficiaria de esta migración empresarial. En 2023, la comunidad madrileña absorbió el 23% de las empresas que abandonaron Cataluña, consolidándose como el destino preferido para las firmas en busca de un entorno más estable y favorable.
La presión fiscal en Cataluña, considerada la más alta de España, ha sido otro factor determinante en la decisión de las empresas de trasladarse. La combinación de inestabilidad política y una carga impositiva elevada ha llevado a muchas compañías a buscar ubicaciones con condiciones más favorables para sus operaciones.
A pesar de algunos intentos de retorno, como el caso de Cementos Molins que recientemente anunció el regreso de su sede a Cataluña, la tendencia general sigue siendo de salida. La mayoría de las grandes empresas que se trasladaron durante el "procés" no contemplan, por ahora, regresar a la región.
Este éxodo empresarial ha tenido un impacto significativo en la economía catalana, afectando la inversión, el empleo y la recaudación fiscal. La continuidad de esta tendencia podría seguir debilitando el tejido empresarial de la región, a menos que se implementen medidas efectivas para revertir la situación y recuperar la confianza de las empresas.
Desde el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, Cataluña ha experimentado una significativa fuga de empresas. Según datos de Informa D&B, cerca de 5.000 compañías han trasladado su sede social a otras regiones de España, mientras que el Colegio de Registradores eleva esta cifra a más de 10.000.
Madrid ha sido la principal beneficiaria de esta migración empresarial. En 2023, la comunidad madrileña absorbió el 23% de las empresas que abandonaron Cataluña, consolidándose como el destino preferido para las firmas en busca de un entorno más estable y favorable.
La presión fiscal en Cataluña, considerada la más alta de España, ha sido otro factor determinante en la decisión de las empresas de trasladarse. La combinación de inestabilidad política y una carga impositiva elevada ha llevado a muchas compañías a buscar ubicaciones con condiciones más favorables para sus operaciones.
A pesar de algunos intentos de retorno, como el caso de Cementos Molins que recientemente anunció el regreso de su sede a Cataluña, la tendencia general sigue siendo de salida. La mayoría de las grandes empresas que se trasladaron durante el "procés" no contemplan, por ahora, regresar a la región.
Este éxodo empresarial ha tenido un impacto significativo en la economía catalana, afectando la inversión, el empleo y la recaudación fiscal. La continuidad de esta tendencia podría seguir debilitando el tejido empresarial de la región, a menos que se implementen medidas efectivas para revertir la situación y recuperar la confianza de las empresas.