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Toledo: tarde grande de Marco Pérez en un serio debut de Pedro Rufo

Tres orejas para Marco Pérez y dos para Pedro Rufo en una tarde complicada por la lluvia, pero de notable ambiente en los tendidos de Toledo. Se trataba de una novillada a beneficio del Hospital Nacional de Parapléjicos, y la respuesta del público fue generosa a pesar del clima.

Marco Pérez volvió a imponer su ley, cortando un trofeo del primero y dos del quinto, este último cuajado con rotundidad y temple. Su capacidad de adaptación al mal estado del ruedo fue clave para mantener la limpieza de faena en los momentos más comprometidos.

Pedro Rufo, que debutaba con caballos, mostró firmeza y claridad de ideas. Supo templar los ánimos con su toreo clásico y ajustado, cortando una oreja al cuarto y otra al sexto tras momentos de gran intensidad. El de Pepino no se dejó amedrentar ni por el barro ni por el compromiso.

La novillada de Montealto presentó cuajo y variedad, destacando especialmente los últimos tres ejemplares. Fue una tarde de entrega, solidaridad y afición en la ciudad imperial, con ambos toreros saliendo a hombros y dejando el listón alto para la temporada.

Así resumo esta novillada de Marco Pérez y Pedro Rufo; casi en un barrizal.

Marco no torea novillos, los traduce. Lo del quinto fue otra clase magistral. Qué madurez para un chaval de 17 años.

Rufo se fajó de verdad. Me encantó cómo se tiró a matar en el cuarto. Con esa actitud, este chico va a durar.

La gente fue por la causa y salió hablando de toreo bueno. Así se engancha a la afición joven. Bien por Toledo.

Me sorprendió lo seria que vino la novillada de Montealto. El sexto fue de nota alta y Rufo no lo desaprovechó.

Marco Pérez va creciendo. Hubo quien se quejaba de su altura física, de que no crecía, y no se podía esperar una gran figura del toreo en un cuerpecito chico, como si Enrique Ponce fuera Sabonis.

Si el ruedo hubiera estado en mejor estado, esta tarde se recuerda como un hito. Y aún así, vaya cómo torearon.

Qué lujo ver a dos chavales tan entregados con un público entregado también. Y con el Himno sonando, emoción total.