El lenguaje antitaurino es una batalla perdida
Publicado: Mié Jun 05, 2024 11:34 am
El lenguaje antitaurino es una batalla perdida
Los antitaurinos han conseguido compartir un lenguaje para sus teorías que resulta fácil de entender para todos sus seguidores; sus expresiones no están preparadas para el debate o intercambio de opiniones; y además, para impedir "intercambios" sobre sus teorías con otras personas, han elaborado un intrincado código que evita cualquier discusión o debate. Son los antitaurinos o animalistas todos ellos casi como una secta.
Pongo un ejemplo. Una de sus frases más repetidas es esta "la tortura no es cultura". Estamos ante una frase pegadiza, fácil de asimilar, fácil de recordar, no necesita "pensar". Primer objetivo conseguido: la frase es pegadiza y tiene gancho para pescar incautos.
En cuanto a la segunda parte, esta expresión no está preparada para el debate. Y no está preparada porque las partes del debate se encuentran ante conceptos o ideas distintas para debatir. La gente común comparte esto: "La tortura es un delito" y "la cultura es otra cosa". En resumen, son cosas distintas que no se pueden mezclar ni comparar. La tortura es un delito por razones históricas totalmente alejadas de las corridas de toros; como alejada está la tortura del transporte a caballo o tan alejada está la tortura de una exhibición canina o una exhibición de saltos de caballos.
En el transporte o en la doma de animales -que muchos antitaurinos se prohíben entre ellos y quieren prohibir a los demás- los animales sufren, como sufre un toro. ¿Se puede llamar tortura a esto? Esto en cuanto a la segunda parte, manejamos conceptos, filosofías distintas.
Y en cuanto a la tercera, comparten un "código" los antitaurinos que impide todo debate. Ese es un código, además, con un núcleo tóxico, pero que no se advierte la toxicidad. La frase la "cultura no es tortura" rebaja a las personas al nivel de las bestias; o iguala las bestias con las personas. Solo hay "una civilización" en la tierra que iguala, equipara a las personas con las bestias, y ni eso, porque, estamos hablando de los musulmanes, para ellos un camello vale más que una mujer. Esta es la parte tóxica de "la tortura no es cultura" que los antitaurinos ocultan en la frase.
Los antitaurinos han conseguido compartir un lenguaje para sus teorías que resulta fácil de entender para todos sus seguidores; sus expresiones no están preparadas para el debate o intercambio de opiniones; y además, para impedir "intercambios" sobre sus teorías con otras personas, han elaborado un intrincado código que evita cualquier discusión o debate. Son los antitaurinos o animalistas todos ellos casi como una secta.
Pongo un ejemplo. Una de sus frases más repetidas es esta "la tortura no es cultura". Estamos ante una frase pegadiza, fácil de asimilar, fácil de recordar, no necesita "pensar". Primer objetivo conseguido: la frase es pegadiza y tiene gancho para pescar incautos.
En cuanto a la segunda parte, esta expresión no está preparada para el debate. Y no está preparada porque las partes del debate se encuentran ante conceptos o ideas distintas para debatir. La gente común comparte esto: "La tortura es un delito" y "la cultura es otra cosa". En resumen, son cosas distintas que no se pueden mezclar ni comparar. La tortura es un delito por razones históricas totalmente alejadas de las corridas de toros; como alejada está la tortura del transporte a caballo o tan alejada está la tortura de una exhibición canina o una exhibición de saltos de caballos.
En el transporte o en la doma de animales -que muchos antitaurinos se prohíben entre ellos y quieren prohibir a los demás- los animales sufren, como sufre un toro. ¿Se puede llamar tortura a esto? Esto en cuanto a la segunda parte, manejamos conceptos, filosofías distintas.
Y en cuanto a la tercera, comparten un "código" los antitaurinos que impide todo debate. Ese es un código, además, con un núcleo tóxico, pero que no se advierte la toxicidad. La frase la "cultura no es tortura" rebaja a las personas al nivel de las bestias; o iguala las bestias con las personas. Solo hay "una civilización" en la tierra que iguala, equipara a las personas con las bestias, y ni eso, porque, estamos hablando de los musulmanes, para ellos un camello vale más que una mujer. Esta es la parte tóxica de "la tortura no es cultura" que los antitaurinos ocultan en la frase.