Pues se ha anunciado a través de Zabala de la Serna que Ramón Valencia ha presentado su dimisión en la Junta de Anoet donde era vicepresidente. En muchas asociaciones en caso de empate el voto del presidente es decisivo. Con lo cual, lo que diga García Garrido va a misa.

Javier Castaño ha tenido que lidiar los toros más difíciles, pero esto no es suficiente para ser figura del toreo para el público en general. Y eso no está bien.

Cuatro vocales, dos vicepresidentes -uno R Valencia- y un presidente. Si Ramón Valencia dimite queda una junta con seis votos; esto puede ser el empate infinito.

Lo histórico no es solo el cambio: es que, por primera vez en décadas, la Maestranza apuesta por un empresario con narrativa contemporánea. El desafío institucional que tiene delante es colosal.

Lo importante no es solo cuántos van, sino cómo participan: pagan, miran, comparten, defienden. Eso construye comunidad.

Nosotros también estuvimos ahí, en ese lugar exacto. El de aplaudir al campeón con los dientes apretados.

Ha ganado el Real Madrid y ha convencido. Enorme trabajo del VAR anulando goles y penaltis; pero el Barcelona no mereció empatar. Victoria del equipo blanco y segundo protagonista, Vinicius.

Solo tres toreros salmantinos tienen más paseíllos que él: El Viti, Capea y Robles. Ya está dicho todo.

Si de verdad entra Bordalás, veremos un Atleti más feo pero más competitivo. Lo importante es usar esos 50 millones extra con cabeza. Y ahí es donde siempre el atleti falla.

Tauromaquia: el pueblo decide. Anima Naturalis: el pueblo obedece.