Que no fastidien: yo prefiero pelos en la sábana antes que ronquidos de suegra o discusiones de pareja. Cada cual su miseria.

La tauromaquia popular, lejos de ser un residuo del pasado, se perfila aquí como símbolo de continuidad cultural y de respeto por los ritos de comunidad que definen la vida vasca.

No salió nunca por la puerta grande de Madrid, pero dio la cara cada vez que fue. Eso es otra clase de triunfo.

Todo será seguridad, salubridad y silencio... hasta que el siguiente decreto prohíba las palomas por defecar sin licencia.

Este colapso demuestra que la tauromaquia sigue fuerte, pese a sus enemigos.

Los números de Madrid tienen capacidad de arraste, son como un imán... y lo hemos visto en el partido socialista absteniéndose ¡y traicionando! a los que tienen a Sánchez en la Moncloa.

Ninguna mujer quiere ser esclava. El islam garantiza la esclavitud para las mujeres, esclavitud de por vida.

En Corea, la decadencia política no se esconde: se asume. Aquí, aún fingen que pueden volver a octubre de 2017. Es patético.

Aunque Ortega no toca el tema del maltrato animal porque en su época no se hablaba tanto de eso, me parece justo que no cierre los ojos a lo difícil del asunto. Él no dice que los toros sean solo bonitos o buenos, dice que son complejos. Que hay que entenderlos como parte de una historia, no como un...

Si los toros no generan ingresos, que alguien explique cómo se pagan todas esas retransmisiones de Castilla-La Mancha. Spoiler: con beneficios.