La Cascada más alta de la Comunidad de Madrid

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Visita y paseo
Somosierra es la localidad más al norte de la Comunidad de Madrid y ha sido paso obligado de montaña. Como lugar de paso, ha sido plaza estratégica también, y, por ejemplo, en la historia, Somosierra levantó una ermita en recuerdo de la carga de la caballería polaca ordenada por el emperador Napoleón en persona, contra los defensores serranos en la Guerra de la Independencia.

Solo la ermita recuerda aquella batalla en la que tomaron parte Napoleón en persona y el general Hugo, padre del famoso escritor Víctor Hugo. Fue poco después de la primera derrota militar del emperador en la localidad jienense de Bailén.

Napoleón ordenó cargar montaña arriba a la caballería polaca quienes fueron recibidos a cañonazos, aunque sobrepasaron las defensas tras una carnicería. Una ermita sencilla recuerda la batalla.

Somosierra pasó a la historia militar por dicha carga de caballería ordenada por Napoleón en persona a su caballería polaca, montaña arriba, sable en mano; éstos cruzaron las líneas hispanas formadas por civiles armados, con enormes pérdidas entre los asaltantes; el mariscal Hugo, padre del escritor Víctor Hugo, comandaba la infantería gala.

Como lugar de paso existe también un humilde monumento a los camioneros en la iglesia de la localidad. Muy próximo al pueblo se encuentra la cascada, casi al borde de la antigua carretera Nacional 1. Está bien señalizada, el paseo no es largo, pero sí empinado, y mucho, en la zona de la cascada.

En realidad son tres las cascadas sucesivas llamadas La Chorrera del Tuero o del Lituero. El arroyo El Caño forma las tres cascadas, para luego unirse al arroyo de Pedrizas y formar el Duratón, río segoviano que desembocará en el Duero en la localidad vallisoletana de Peñafiel.

El paisaje corresponde a la llamada Castilla verde o Castilla del agua y que es la vertiente norte de la sierra central. Es espectacular todo a lo largo del año. En la actualidad, se recupera del incendio sufrido hace unos veranos, y la naturaleza abre su paso con renovados bríos, eso sí, retoños.

Desde el pueblo de Somosierra por la antigua Nacional, aproximadamente 1 kilómetro. Sale un camino a la derecha, y está señalado. Las verjas que se atraviesen hay que cerrarlas, pues pasta ganado suelto (no es de bravío.)