Alfredo Landa un actor para varias generaciones con marca personal

[EstoEsElPueblo]

Tal día como hoy falleció en 2013 Alfredo Landa figura destacadísima del cine y creador de un fenómeno llamado "el landismo" para describir la amplitud de facetas que a lo largo de su carrera como actor había desempeñado; facetas de Alfredo Landa que eran espejo de toda una época: de los años sesenta, setenta y ochenta, en España.

Sus películas y series de televisión cosecharon éxito tras éxito, y su trabajo fue reconocido con las más altos premios del cine.

Nacido en Pamplona en 1933 comenzó su andadura teatral en la Universidad de Madrid, a donde llegó en 1958 para estudiar derecho. Son 45 años de profesión y 133 películas. Y unas cuantas ambientadas o directamente ligadas a la tauromaquia.

[Taurologica]

Alfredo Landa fue el Humpfrey Boggart español Pero con más expresividad en el rostro. Si Boggart solo tenía una cara, Alfredo Landa poseía una enciclopedia de gestos en el rostro, ¡para cada película!

[Marciano]

Alfredo Landa fue el Humpfrey Boggart español

Me gusta esta frase, sin complejos; Bogart era un tipo sin expresiones en el rostro, parecía más un mimo que un actor de cine. Landa le daba mil vueltas ahí.

[Marlon]

Firmado: Alfredo Landa fue el Humpfrey Boggart español. Creo que con más tirón popular, que el americano se las daba de elitista.

[guitarrero]

Alfredo Landa fue un actor de múltiples registros también en su vertiente taurina: actuó en tres películas del género. Landa encarnó a El Verónicas en el largometraje Nuevo en esta plaza, que cuenta la biografía del torero Sebastián Palomo Linares. Inmortal también fue su papel en La Vaquilla, del valenciano Luis García Berlanga, donde dio vida al Sargento Castro y en algunas escenas toreó a un becerro.

Pedro Lazaga dirigió a Landa en Las Cicatrices, donde interpretó a Tormentos, un amigo de Pedrín Benjumea, un joven aspirante a torero que intenta cada noche ejercer su vocación y lucha por encontrar el éxito en los ruedos.

[Cuéllar]

Las diez mejores películas de Alfredo Landa, aquí, y para mi "La vaquilla" una que habéis visto todos.
https://www.20minutos.es/cinemania/noti ... nda-10696/

[BaskoToro]

A Alfredo Landa le falta -y le faltó e vida- un potente club de fans, pero resulta que era tan bueno que no lo necesitó. Y sus sucesores no están presentes en las redes para reivindicar su memoria y su obra, especialmente su obra.

[KritiKón]

Firmado: Alfredo Landa fue el Humpfrey Boggart español. Creo que con más tirón popular, que el americano se las daba de elitista.

A mi me parece que Alfredo Landa es un actor poco valorado y Humphrey Bogart un actor sobrevalorado. Bogart era un constructo de Hollywood, que supo subirse al vagón correcto en tiempo de la llamada "caza de brujas". Pero la misma locomotora arrastraba ese vagón: el sistema Hollywood.

Os dejo una comparación de hace un tiempo entre Humphrey Bogart en sus mejores papales, Casablanca y el Halcón maltés; y de otro lado, Landa en Las verdes praderas y El crack:

Bogart en Casablanca y El halcón maltés es puro carisma. Su aparición con gabardina, sombrero y cigarrillo en Casablanca es ya historia del cine; en El halcón maltés, basta con que esté en pantalla para que todos los demás desaparezcan. Pero aquí va la idea incómoda: no era él quien dominaba la escena, sino la cámara. Su rostro —marcado, expresivo— era perfecto para el primer plano, y directores como Curtiz o Huston lo sabían. Bogart fue una creación del sistema: buena luz, buenos guiones y una leyenda bien cuidada. En teatro fue solo correcto; en cine, Hollywood lo hizo inmortal.

Landa en Las verdes praderas y El crack: Landa no tenía el respaldo de Hollywood. En Las verdes praderas, su José Rebolledo llena la pantalla con energía pura: gestos, voz rota, y esa facilidad para pasar de la risa al llanto. En El crack, su Germán Areta domina cada plano con una mezcla de dureza y ternura, sin necesidad de una cámara que lo embellezca. Landa no dependía del montaje ni del glamour; se hacía presente desde cero, en un cine español con medios justos. Y aquí va lo más fuerte: no solo acaparaba la escena, lo hacía en un país que, entre franquismo y Transición, pedía héroes reales. Su "localismo" no era un límite, era su fuerza: hablaba con la verdad de su gente. Ese "localismo" de Landa —hecho de barrios, aceras y miradas de verdad— en realidad es "universalismo", esa verdad, la suya, también podría vivirse en Soria o en Roma, en Londres o en Illinois.

[Rupertino]

Hace falta una reposición de las películas taurinas de Alfredo Landa, un autor no lo suficientemente valorado.

[6Sevilla]

Alfredo Landa es un actorazo con proyección nacional. al otro, al norteamericano, le lanzó la industria de Hollywood y le convirtió en actor favorito incluso de los antiamericanos. Pero no era mejor actor. Ni voz, ni gestualidad, ni capacidad de adaptación a papeles variados y complejos.