El Juli se despide de Madrid por la puerta grande

[Manolito_Gafotas]

Algunas de las crónicas han sido ásperas en la despedida, defraudadas por el ganado y las faenas:
'Como una boda gitana'

Darío Juárez, web por el pitón derecho
https://www.porelpitonderecho.com/inici ... tana--7219

Ayuso recogía la primera ovación de la tarde cuando apareció por el callejón enfrascada en una americana fucsia, camino de situarse en el burladero que la empresa le había reservado para ver la última tarde de su Juli en Madrid, con la sonrisa tonta e inocente cuando éste le brindó el 2°, como si de un amor platónico que dejó repitiendo curso en el instituto cuando marchó a la uni se tratara. Pero no era el roneo de la presidenta lo que buscaba Julián en la tarde de este 30 de septiembre, sino el del culto de julistas que congregó con sus mejores galas para colgar el "no hay billetes" el día de su presunta despedida de la plaza de Madrid, que hoy volvió a quedar reducida a cenizas cuando el vergonzoso jaleo de las palmas por los mínimos -pese a la letanía de ser el premio a una trayectoria cuando hablamos del rigor que debería tener y no tiene la que debe ser la primera plaza del mundo-, entre padrinos y compadres, mulilleros y la flojera del Pastor que presidía desde el palco dicho culto, sacaron a hombros a Julián por segunda vez en 25 años porque sí.

Se había ya deshecho el paseillo cuando le obligaron a saludar, antes de que saliera con la frialdad típica del encaste el primer inválido del Puerto, para que Uceda Leal y el reposo de su toreo recio y castizo acabaran por verbalizar una faena corta dándole todas las ventajas al toro hacia los adentros que marcaba su querencia, de más a menos por la connotada falta de fuerza, y de menos a más el efímero calor del trasteo cuando terminó por explotar Madrid con dos naturales hondísimos y largos, con media muleta por debajo del hocico en las postrimerias de una faena cerrada también con otro ramillete imperfecto de enfrontilados naturales. La espada cayó bastante caída. El manso 4° y su lidia hicieron imposible rascar nada al de Usera.

No dio tiempo a encender un cigarro cuando la plaza ya le cantaba coplas del Sacromonte a El Juli en la primera verónica de recibo, como lo hacía el pecho del matador abriendo la vereda hacia los medios a ese 2° que se entregaba a los vuelos del madrileño, bajando cada vez más las manos. Hasta tres medias. La segunda, de autor. Quitó al paso y por Chicuelo para colocarlo frente al peto de Barroso. Y volvió con un segundo entre varas por tijerillas alternadas con más chicuelinas y otras dos medias. Julián estaba inspirado frente a un toro que sabía que se podía quedar en el capote y le dio igual. Quería poderlo y lo más difícil, sujetarlo. Pero no tirándole al suelo, hombre. ¡Y por dos veces! Sobra decir que el Juli intentó por todos los medios sacar zumo de ese animal afligido que ya no le daría más que la invitación para que lo matara. Pero no de esa manera, hombre, aunque formaba parte del guión. Como también se presentía que le pidieran la pelúa para encarrilar la boda gitana que había comenzado hacia el destino de la Puerta Grande, y que sorprendentemente aguantó Eutimio desde el palco. Esta era la de arena.

Pues el saco de cal lo tenía guardado entre las piernas para el 5°, despediendo a Julián como hoy no debería haberlo hecho, regalándole la segunda oreja de una faena técnica intentando hacer al toro al trazo de su mano izquierda, para acto seguido atacarlo al hilo por el derecho, antes de un soberbio cambio de mano erguido que volvió loca a la plaza e intentó repetir sin éxito en terrenos del 5 y el 6. Ese pase hizo que la parroquia se partiera la camisa y tomara extasiada como continuidad de ese muletazo todo lo regular, imperfecto o vulgar que antes y después de ese preciso momento había tenido la faena. El julismo rendido, su horrorosa ejecución caída, y los dos pañuelos apareciendo por el altar del pastor. ¡Qué pena de plaza!

Poco tardó parte del sector más exigente de la Monumental en sacarle facturas atrasadas a Tomás Rufo con el que abrió su tarde, midiéndole como lo que algunos venden que apunta ser: figura del toreo. El de La Ventana derribó a Espartaco por los pechos de su jaco, entrando en escena Sayago en el segundo encuentro. Y entonces brotó el toreo templado de Tomás a la verónica, soplando al de los Frailes tres a cámara lenta por el izquierdo y la media, para soñar despiertos. No le probó ni tan siquiera con dos lances de apertura, cuando le robó la primera por el derecho. A partir de ese momento, el toledano se volvió loco y acelerado buscando el temple que no encontró, pero olvidándose de la colocación que reiteradamente le exigían algunos con silbidos, hasta que se enrrabietó espatarrándose con vehemencia para cruzarse al contrario, con la aprobación del resto de la plaza quedándose todo ahí. Se encasquilló con los aceros y saludó una ovación.

Algo más reunido se le vio con el 6° que se quedó en el electrificante inicio de rodillas con menos de media muleta tras el brindis al Juli y el desdén en pie, con el toro respondiendo a un diapasón exigente y poderoso. Dos tandas forzadas después, con el toro venido muy a menos, un pase de pecho de 360° rompía el cielo de la Monumental con un estruendo de olés como no se había escuchado en toda la tarde. Remató por manoletinas un final de faena que firmó con la espada, tirándose encima del toro para terminar paseando una orejita de poco fuste.

*Ficha del festejo:

Monumental de Las Ventas. 1ª de la Feria de Otoño. Lleno de No hay billetes. Se lidiaron 4 toros de Puerto de San Lorenzo y 2 de La Ventana del Puerto (2° y 3°), bien presentados, con sus hechuras propias del encaste, pero descastados en su mayoría, venidos a menos e inválidos como fueron 1° y 2°.

Uceda Leal, de obispo y plata. Ovación con saludos y silencio.

El Juli, de berenjena y oro. Ovación con saludos tras petición y dos orejas. Salió a hombros por la Puerta Grande.

Tomás Rufo, de nazareno y oro. Palmas tras aviso y oreja.

* Se desmonteraron Blasco y Sánchez tras parear al 3°.

[Intelectual]

En Sevilla se deslizó al final de la corrida para no ser sacado a hombros como ya sucedió con otro torero en su despedida sin triunfos pero con un carrerón a sus espaldas. Dice mucho de Julián López como torero.

[TaxistaMadrid]

¿Alguien para comparar a El Juli con Enrique Ponce?

[RaboDeToro]

Ha sido una puerta grande de regalo, de saldo: ni hubo toro ni hubo faena de dos orejas. Madrid pagó una deuda de hace 20 años. Pero El Juli no estuvo bien y mató mal, con su julipié.