Otra forma de ser socialista sin que lo parezca; y que te la claven a ti
Recuerdo en mi época de la EGB y el Bachillerato cuando en lecciones de literatura nos explicaba el profesor que incluso los principales escritores debían estar bajo la protección del poder: un duque, un conde o un marqués; a falta de noble, alguien próximo a la Corte, para evitar males mayores si los escritos de nuestro autor no gustaban "en las alturas". El uso sigue; explico cómo; y las consecuencias.
Hay periodistas que escriben lo que parece una crítica, pero es un halago oculto. Sí, lo que parece una crítica al PSOE, se transforma en un halago de luminosidad diversa. ¿Cómo? Fácil, critico a Sánchez; pero critico más aún a la oposición: está a oscuras; la oposición es ciega; y mejor nos vale un tuerto; la oposición es torpe, y gana por astucia el socialismo; la oposición es indocta, y el socialismo está muy cultivado y es intelectualmente superior.
Aquí os pongo un ejemplo de cómo un comentarista que se dice independiente, después de exigir la retirada de Sánchez... prosigue con una labor de zapa: fijáos en manos de quién "no" quiere dejar a los españoles (machaca minuciosamente al PP), o sea, que prefiere a un "Sánchez 2" para suceder al "1" aunque este sea lo peor de occidente.
¿Dónde está la conexión con el duque, el conde o el marqués de los clásicos? Aquí:
El "poder" (sobre todos los medios) está en la izquierda desde hace años; el poder de favorecer la edición de un libro; un programa de televisón; de radio; una película subvencionada; la aprobación de unas conferencias; la subvención de unos cursos de verano... y un largo etcétera de actividades remuneradas -con dinero público, claro- que gestiona sin pudor la izquierda desde ayuntamientos, diputaciones, comunidades autónomas, ministerios y otros organismos camuflados en los ya citados... Esos dineros administrados desde los nuevos "marqueses" o "condes" socialistas son el poder invisible que maneja los hilos.
Con esto quiero decir que muchos periodistas que "parecen" independientes en realidad tienen un ojo puesto en la subvención (¿qué hay de lo mío, señor marqués?) y cuando "disparan" al PSOE, se aseguran de "haber matado" previamente a la oposición.
Pongo un ejemplo de un columnista (de pago) que fue del PSOE hasta que encontró otros dorados acomodos: Ignacio Varela en El Confidencial y este ejemplo publicado el 23 de octubre. Una crítica al PSOE... pero antes "mata" a todo el PP, a todos: